El horizonte Apostólico

El horizonte apostólico está fundado desde nuestro Carisma Congregacional. Todas las hermanas Dominicas de la Inmaculada Concepción estamos unidas en un solo corazón y una sola alma en Dios, nuestro centro es Cristo y contemplándolo a Él buscamos atender a nuestros hermanos que más lo necesitan a ejemplo de Jesucristo.

Nuestra Madre Eduviges Portalet, en su tiempo vio la necesidad de custodiar a las almas que estaban privadas de la luz física, abandonados a su suerte, en las peores condiciones. Madre Eduviges contemplando esta realidad, busco incansablemente brindarles dos cosas esenciales; que conozcan y amen a Dios, teniendo así, una base sólida en su vida de fe y brindarles educación para que luego pudieran insertarse y valerse en la sociedad. Hoy la ceguera física se ha trasformado en una ceguera espiritual que ataca al hombre de una manera impresionante. El pecado se hace más fuerte haciéndole creer al hombre que puede ser Dios para así poder sacarlo de su vida, llevando al hombre muchas veces a convertirse en verdugo de su propio hermano, conducido por la soberbia y orgullo que domina su vida y su pensamiento.

La familia DIC, busca hacer un camino de humildad y sencillez, y de completa entrega a Dios a ejemplo de nuestros Santos Fundadores, Domingo de Guzmán y Eduviges Portalet, quienes incansables desgastaron toda su vida, por la salvación de las almas. Por eso, una Dominica se sabe toda de Dios y teniendo su seguridad en Él, aprende a vivir con lo necesario e indispensable. Si tu corazón siente el deseo de vivir solo en Dios y en Él, anunciarlo a los demás a través de la predicación, este es tu lugar.

¡No dudes y síguelo!